La locura, Por Julián Dadante
La Locura
Frío. Un enorme laberinto de piedra helada. Muros hasta el cielo. No hay salida. El hombre deja escapar un llanto seco en una esquina, un sollozo ahogado. La lluvia comienza a caer, callando el silencio ensordecedor que perturbaba su alma. La sangre se congela en sus venas. Miedo. Los pasillos son cada vez más angostos. Su respiración, agitada. Reconoce en los charcos que se forman a su alrededor figuras familiares. Recuerdos de su pasado, un pasado que le fue robado. Deseos locos de vivir. Desprecio por la vida. Sus ojos completamente abiertos. Pupilas dilatadas. Espera. Perdió algo. Él no lo sabe. Siente que la lluvia lo va a ahogar. Los muros siguen acercándose. Un dolor punzante sobre sus ojos. Transpira. Puede sentir la presencia de la bestia, en algún rincón de aquél enorme laberinto. Sabe que es cuestión de tiempo. Frío. Miedo. Espera.
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